Review | Ant-Man con Spoilers


Marvel Studios presenta con éxito el potencial de su héroe miniatura, pero comete errores que ya son un clásico de sus producciones.
ant-man
El más reciente estreno de Marvel Studios es lo suficientemente eficiente como para justificar la compra de la entrada. Pero al mismo tiempo, Ant-Man es un nuevo ejemplo de que en las propuestas de este estudio hay una fórmula que ya está llegando a nivel tufillo de repetición. De partida, su esquema base es similar a la primera Iron Man, especialmente en lo que concierne a la dinámica de su villano. Pero también hay otros elementos ya vistos en más de una ocasión.
A grandes rasgos, el problema de Marvel está marcado explícitamente por la decisión de la productora de dar nulo espacio para que surja una voz de autor que diferencie a cada película. Es lo que motivó las críticas del director de Thor 2 y la salida de Edgar Wright, aunque la mayor parte de su guión es lo que guía a este proyecto, y es la razón que explica que las películas Marvel parezcan cortadas por la misma tijera.
Una situación que es positiva para el universo cohesionado de Kevin Feige, pero que ha generado tragedias opacadas por la necesidad de agregar guiños y cameos como fue el caso de Iron Man 2. Además, y más importante, esa opción no beneficia a cada propuesta en particular. Si eres fan de lo que está haciendo este estudio, es difícil decepcionarse. Pero si quieres más, es mejor tener claro que el objetivo aquí no es otro más que expandir una marca. La del lucrativo universo Marvel como un todo.
ant-man-1
Hay que considerar que Peyton Reed, el director de Ant-Man, previamente hizo comedias como Bring it On y Yes Man, lo que se traduce en que el humor y el tono liviano sea lo que más funcione en la película. Asimismo, los efectos están bien y hay secuencias relacionadas al CGI muy dinámicas, lo que dice más del trabajo de las 14 compañías de efectos digitales involucradas que otra cosa, pero en su esquema no hay nada tan descollante en términos de tratamiento de la acción, en los combates, como para desencajar mandíbulas. Básicamente, a Peyton Reed le pagaron el cheque para ser lo más Edgar Wright posible.
Lo bueno es que, pese a que no se siente tan fresca como Los Guardianes de la Galaxiaen Ant-Man hay elementos lo suficientemente “novedosos” como para pasar por alto la repetición tanto de su esquema base como del camino que lleva adelante su héroe. Siendo considera como película de orígenes, es mucho más potente que la primera Thor, aunque nunca es tan sólida como el acto inicial deCapitán América: El Primer Vengador.
En Ant-Man nos revelan un nuevo rincón del universo Marvel, presentándonos la existencia de una tecnología que estuvo en la mira de S.H.I.E.L.D. y el padre de Tony Stark. Pero Hank Pym, el mejor personaje de la película y quien es interpretado porMichael Douglas, se negó a entregar su descubrimiento miniatura. Años después, su protegido, Darren Cross, quien se quedó en control de la compañía de Pym, intenta replicar el avance tecnológico, para satisfacer sus fines armamentistas y económicos. Como dije, todo muy Iron Man.
ant-man-2
Para batallar a ese enemigo, en Marvel nos presentan a un nuevo héroe que sigue el estereotipo que ha ido de la mano del éxito de sus películas y que está marcado por la sombra que ejerce Robert Downey Jr. El Scott Lang interpretado por Paul Rudd es un tipo chistoso, que no se toma muchas cosas en serio, pero que tiene claro que sus problemas surgen en gran parte por sus propias acciones. Tony, Star-Lord, Scott, suman y siguen.
Lang es así un Tony Stark pero sin plata, con una hija y un registro criminal, cortesía de una acción de su pasado que lo llevó a intentar ser un Robin Hood contra una megacorporación injusta. Pero lo importante a la larga es que, como criminal, puede acceder a donde otros no pueden y esa cualidad se potencia una vez que se hace del traje del Hombre Hormiga.
La mayor fortaleza de la película es que toman un concepto tan liviano como el que da vida al Hombre Hormiga y lo hacen funcionar, sacándole partido a sus habilidades. Una situación realmente valorable, ya que Ant-Man, como personaje de los cómics, tradicionalmente ha estado marcado más por el hecho de que Marvel nunca se ha decidido muy bien sobre qué hacer con el personaje. Pese a que es reconocido como un miembro fundador de Los Vengadores, en las viñetas tiene múltiples versiones y el propio Hank Pym ha asumido otras identidades, que incluyen a Giant-Man, Goliath y YellowJacket.
ant-man-3
En el caso de la película, tienen claro que lo mejor de este superhéroe es lo extraño de sus habilidades y su gancho radica en el cómo sacan partido a los elementos de ciencia ficción adheridos a su médula. Desde su condición como héroe en miniatura, lo que a futuro abrirá el campo de posibilidades una vez que tenga que interactuar con los Vengadores, a su relación con las hormigas. Algo alocado y divertido.
También hay otros conceptos asociados a la condición de sus poderes que sirven para justificar a esta película, como la particularidad de dar un salto a un entorno sub-atómico. Un elemento peculiar que no es presentado de la forma más asombrosa en términos visuales, pero que funciona para validar al personaje y su espacio en este universo cohesionado.
Claro, igual lo que más destaca es la propia habilidad de reducir su tamaño. Es lo que eleva a Ant-Man, es el motor que hace funcionar su propuesta. Y en la película, la primera secuencia de Lang con el traje, en una escena que comienza al interior de una bañera, es visualmente muy atractiva. Sumen además que el héroe posee unos discos para agrandar o empequeñecer objeto, lo que es una particularidad que funciona para hacer secuencias de acción aún más novedosas en su propuesta de chiquitolina.
ant-man-4
Asimismo, las opciones de combate, como este superhéroe aumenta o minimiza su tamaño a placer, a toda velocidad, también brillan. Aunque hay que decir que el diseño visual ya estaba dado por aquel corto de la Comic-Con dirigido por Edgar Wright, a quien es inevitable de recordar durante el transcurso de la película.
Por el contrario, el villano nuevamente es el punto bajo de una producción Marvel. Como característica habitual de estas películas, el enemigo a derrotar no es ni tan novedoso ni tan bien definido como para volverlo un rival memorable. En los cómics, Ant-Man carece de villanos por montones. Y como Ultron ya se lo regalaron a Tony Stark en el cine, tampoco demostraron que pueden hacer algo con uno creado especialmente para la pantalla grande.
Además, nunca hay un desarrollo que eleve a este enemigo espejo, que terminará utilizando un traje amarillo con mucha más potencia de ataque que Ant-Man. En algún momento explican que la exposición a las partículas Pym, que es lo que permite funcionar a esta nueva tecnología, lo está volviendo loco. Pero todo queda demasiado en el aire.
ant-man-5
Al menos esa situación habitual es contrarrestada de una u otra forma. Por un lado, se las ingenian para acentuar que en el medio hay un tipo de conflicto que no han explorado mucho en el pasado. Scott Lang no quiere defraudar a su retoño, mientras que Hank Pym considera que ya es demasiado tarde como para arreglar la relación con su hija Hope (Evangeline Lilly).
Otro elemento a destacar, y en contraste a la parafernalia habitual en el cine de superhéroes, es que la batalla final está situada en un entorno muy diferente. Lo que está en juego en Ant-Man es de un alcance minúsculo en comparación a las explosiones de edificios tradicionales, pero no por eso lo tratan de forma menos relevante.
A la larga, Ant-Man tiene cosas novedosas, pero comete los mismos errores característicos de Marvel: tiene un villano débil y su personaje femenino no tiene carácter y perfectamente podría ser intercambiable con otras mujeres ya vistas en otras de las apuestas de este universo. Aunque la película termina con una promesa, de que a futuro le darán el foco que no les han dado a las superhéroes, las escenas post-créditos nunca bastan para saldar lo que no se justificó durante todo el metraje.
Algunos la valorarán como antesala de Capitán América: Guerra Civil, ya que demuestran que funcionará como jugador secundario, pero lo más relevante es que mucha hambre de Ant-Man 2 no dejan. Todo queda ejemplificado con la última desinflada escena antes de los créditos, que precisamente se preocupa de enganchar con el resto del universo, en vez de abrir más posibilidades a este superhéroe.

Comentarios

Entradas populares